En la actualidad, son más los desarrolladores que deciden iniciar un modelo de construcción vertical, el cual les permite optimizar el espacio disponible de una construcción que cada vez es más escaso en las ciudades.
¿Qué son las construcciones verticales?
Las construcciones verticales son inmuebles edificados en varios niveles dentro de un terreno común, también se pueden definir como inmuebles que cuentan con varios locales y/o viviendas que pertenecen a uno o más propietarios, dichos inmuebles tiene la finalidad de obtener ingresos mediante el arrendamiento de los espacios disponibles.
Diferencias entre construcciones verticales y horizontales
A diferencia de los verticales, los desarrollos horizontales se caracterizan por estar distribuidos sobre un terreno. Para este tipo de construcciones se requiere de mayor espacio, como pueden ser las privadas residenciales, para las cuales se requiere de un gran número de hectáreas de terreno.
Además, en un desarrollo horizontal, cada persona es dueña de una parte del terreno así como de la construcción que se encuentra en ella.
En caso de las construcciones verticales, el dueño del edificio puede alquilar las oficinas o departamentos de dicha propiedad, sin perder la totalidad del inmueble y de la tierra, sin embargo, el mantenimiento queda a cargo del propietario, así como las obligaciones fiscales y administrativas.
A diferencia de los terrenos de inversión ideales para industria o residencias, los desarrollos verticales funcionan mejor dentro de las ciudades, ya que pueden existir en extensiones de tierra no muy grandes si se lleva a cabo un buen manejo del diseño y planeación del mismo.